Un grupo de pacientes con enfermedades renales que están asegurados por el Seguro Integral de Salud (SIS) se quejaban anoche porque no eran atendidos en la clínica que el SIS contrató para brindar el servicio de hemodiálisis, debido a trámites burocráticos.
Se quejaban de que el convenio entre el SIS y la clínica establece que atenderá sólo a pacientes en emergencia derivados del hospital Hermilio Valdizán.
Pero ayer sólo tres máquinas de hemodiálisis del hospital estaban operativas y ocupadas con pacientes en situación de emergencia.
Por esa razón los otros pacientes no podían dializarse y durante toda la tarde —dijeron— tramitaron su atención en la clínica, pero la autorización del SIS de la sede de Huancayo no llegaba.
Gregorio Chanamé, médico urólogo del Hospital Hermilio Valdizán, sostuvo que la clínica debería acoger a los pacientes que el hospital no puede atender y no solo a los de emergencia. Advirtió que un paciente renal puede entrar en emergencia si no se dializa.
En ese sentido planteó revisar el convenio entre Sanusalud y el SIS.
También pidió agilizar el trámite de la autorización para evitar retrasos innecesarios en la atención.