Pacientes renales del IVSS en Aragua peligran por falta de diálisis

11.08.2018 21:24
 

Pacientes renales del IVSS en Aragua peligran por falta de diálisis

Indicaron que cada semana mueren 5 pacientes en Aragua por esta condición

Pacientes renales padecen las secuelas de la crisis hospitalaria en Aragua,  aseguran que los hospitales de la entidad no están dotados para que pacientes con necesidad de diálisis sean atendidos de manera eficiente y que tienen más de tres semanas sin tratamiento por la falta de insumos y agua. Situación que pone en grave riesgo la vida de los pacientes renales.

 

El último registro de pacientes, conocido en el estado, arrojo que en Aragua por lo menos unos 2 mil 500 pacientes ameritan la terapia, sin contabilizar los que reciben diálisis peritoneal y los que aún están a la espera.

 

En el Hospital Central de Maracay (HCM), principal centro de salud, solo hay ocho camas para pacientes renales, situación que se agrava dada la carencia de insumos. Tampoco cuentan con ambulancias ni equipos para hacer seguimiento a las condiciones de salud en que se encuentran.

La situación empeora, pues los afectados imploran, atención y respuesta por parte de autoridades del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS) así como del Gobierno regional.

 

Según Ascanio, semanalmente 5 pacientes pierden en las unidades de diálisis. Y ante ello, responsabilizan a la dirección nacional de Nefrología del IVSS, “Aragua es el único estado que no tiene unidad de diálisis”. Explicó que las cinco existentes son extrahospitalarias, más la del HCM que está colapsada y el Hospital Militar que no atiende público en general.

 

No son recibidos ni atendidos en centros de salud

 

El doctor Antonio Perez, médico nefrólogo con ocho en el Hospital Los Samanes, denunció la exclusión de la que son víctimas los pacientes renales pues, ante las complicaciones inherentes a la patología hay profesionales que prefieren no arriesgar.“Entiendo que la falta de insumos les arrebata la confianza, pero no sabemos ya que hacer”.

 

Los médicos nefrólogos constantemente deben referir ciudadanos a Caracas, a sabiendas que son pacientes sépticos, en su mayoría de escasos recursos, que por su vida deben acudir a un centro asistencial en el interior del país a rogar atención.

 

Las deficiencias del servicio se agravan y ponen en riesgo la vida de los pacientes. “Cuatro de las unidades no cuentan con planta eléctrica y no hay reactivos para exámenes prioritarios que determinan el tratamiento de cada paciente.

 

Insumos difíciles de conseguir.

 

Otro de los grandes cambios que sufren los pacientes renales, tiene que ver con la dotación de insumos. Y es que a los pacientes les piden un kit con guantes, inyectadoras, agujas, solución y un macrogotero. Y no hay el medicamento eritropoyetina, inyección subcutánea que se aplica cada semana para subir la hemoglobina.

 

Tambien se dificulta la realizacion de los exámenes de laboratorio que incluye evaluación trimestral de úrea, creatinina, fósforo, hierro, perfil tiroideo y detección de hepatitis B y C que antes era parte del tratamiento y lo costeaba el IVSS. Ahora deben pagar los pacientes.

 

Asi mismo, comenzó a escasear el medicamento heparina, que se usa para evitar que la sangre se coagule cuando se está haciendo la diálisis. Los médicos utilizan la mitad de las dosis para rendir el fármaco y hasta reducen la diálisis de cuatro horas a tres para abrir otros turnos y atender a más pacientes dependiendo de la demanda.