Enfermedades renales no tradicionales “golpean” Occidente

18.05.2015 23:13
 

Aunque la Enfermedad Renal Crónica (ERC) “es una epidemia global, porque se ha disparado en todo el mundo a causa de la hipertensión y la diabetes”, en el occidente del país se está dando un tipo cuyo origen o causa no está determinado, pero ya ha afectado al menos mil personas, informó la presidenta de la Asociación Centroamericana y del Caribe de Nefrología e Hipertensión, doctora Nubia Cano.

La ERC (Enfermedad Renal Crónica) o Insuficiencia Renal Crónica (IRC) es una enfermedad que se caracteriza por la pérdida progresiva (por 3 meses o más) e irreversible de las funciones renales.

La doctora Cano explicó que esta enfermedad es provocada por la diabetes, la hipertensión arterial e infecciones y cálculos, pero en algunos países hay muchos pacientes con insuficiencia renal crónica cuya etiología (estudio de causa) no está muy clara, porque no padecen de ninguna de esas enfermedades.

“Lo que se ha notado es que afecta a gran parte de la población agrícola, del campo, expuesta al sol, fumigadores, insecticidas tóxicos; son gente joven y productiva de entre 20 y 40 años”, agregó la especialista de la nefrología.
Explica que estos pacientes se quejan de ardor al orinar (conocida popularmente como chistata), porque como están expuestos al sol, se deshidratan y sus vías urinarias se secan e inflaman.

ABORDAJE

En el XIII Congreso Centroamericano y del Caribe de Nefrología e Hipertensión Arterial y V Congreso Nacional de Nefrología, el cual se desarrollará los días 21, 22 y 23 de mayo en un hotel capitalino, los nefrólogos de Centroamérica, El Caribe y otros países dedicarán todo un día al abordaje de la insuficiencia renal crónica de etiología no precisada, también conocida como Nefropatía Mesoamericana.

La enfermedad está afectando en El Salvador, Honduras, Nicaragua y Guatemala, aunque también hay casos en Sri Lanka, La India y hasta en algunas zonas de Europa se detectó un tipo parecido.

CALOR INFLUYE

Durante el congreso, Nicaragua, Guatemala, El Salvador, Costa Rica y la universidad de Boston presentarán estudios de casos para analizarlos a fin de determinar qué está originando la enfermedad, su distribución, frecuencia y factores, para luego buscar una solución y presentársela a las autoridades de salud.

“Estadísticamente yo no me atrevería a dar números, pero sí, la enfermedad es muy frecuente y se mencionan cantidades, de mil pacientes por ejemplo en el área de Occidente (Chichigalpa, León, Malpaisillo) que están actualmente afectados, pero es con los estudios que se van a analizar la epidemiologia y la cantidad en cada país”, apuntó Cano.

Añadió que han notado que la mayor cantidad de pacientes se concentran en las zonas más calientes del país, por ejemplo en San Rafael del Sur, pero también se dan casos en San Juan del Sur, Rivas, Teuspete y Boaco, no obstante insistió en decir que “el registro de la cantidad de pacientes es deficiente”.

Programa de salud renal para la región

ACCIONES• Los enfermos renales en estadio final requieren tratamiento de sustitución renal extracorpóreo (hemodiálisis), el que se realiza con máquinas en hospitales públicos y privados, pero vía Estado-Empresas Médicas Previsionales.

Nicaragua ha avanzado en cuanto a tecnología y cobertura, pero a juicio de la nefróloga Nubia Cano, hay que trabajar en la prevención, tratamiento y terapia sustitutiva, pero el fin último es crear un programa nacional de trasplante renal.

Durante el congreso se abordarán diferentes aspectos relativos a las enfermedades renales y se buscará como implementar un programa de salud renal en la región.

También se avanzará en la creación de las hojas únicas de registro de pacientes, las que permitirán tener estadísticas sobre el número de población afectada en Centroamérica y el Caribe, y poder localizarlas, para luego programar y proyectar el tratamiento.

La Asociación Centroamericana y del Caribe de Nefrología e Hipertensión no tiene cifras de cuántos pacientes con enfermedades renales se quedan sin atención, porque el problema es que la enfermedad es silente, es decir no hay síntomas hasta que ya avanzó.